miércoles, 26 de marzo de 2014

Que no me olvide... Texto de Jess Browne

Que no me olvide que no hacía tanto frío y que era un plomo cargar un abrigo.
Que no me olvide que estar enamorada era para toda la vida, infinito punto rojo nunca habrá un chico más lindo ni mejor, porque el dolor del primer amor no se cura jamás.
Que la pelea con una amiga era un drama.
Que la hora de dormir no incluía jamás sueño.
Que los grandes no entendían nada.
Que hacer la tarea era una tortura y hablar por teléfono, una necesidad vital.
Que cuidarse era mucho más fácil de lo que me decían.
Que obviamente iba a mirar a ambos lados para cruzar la calle y que no todos los extraños tenían cara de malos.
Que no me olvide que los sentimientos cambiaban por hora y muchas veces por minuto.
Que la alegría era extrema, la tristeza terrible.
Que el mundo parecía más seguro y la libertad un derecho que querían sacarme.
Que no me olvide cómo era odiar y amar a la misma persona todo el tiempo. La contradicción y confusión de querer el mismo abrazo del que después, incómoda, me desprendía.
Que ciertas cosas eran tan necesarias porque era la necesidad de pertenecer lo que estaba en juego.
Que ignorar a los que me molestaban era una utopía que se quedaba afuera del colegio.
Que no me olvide que ni yo sabía qué me pasaba cuando tantas cosas ocurrían.
Que no me olvide que el portazo y la mala contestación muchas veces se me escapaban y después me arrepentía.